Yoga Profundo: el Yoga de la vida

A lo largo de la historia, el Yoga han ido ofreciendo manuales y herramientas acordes al nivel de evolución o, mejor dicho, de involución del ser humano. A medida que se hacía necesario, yoguis, rishis y sabios fueron dejando «miguitas» por el camino del Yoga. Recordemos las más valiosas. Escribe Eva Klimberg.

En la tradición. el Yoga era el manual de intrucciones para la Vida (los Vedas, los Upanishads)…

Al nacer nos dieron un vehículo con un montón de prestaciones y un potencial total para hacer nuestro viaje… pero se olvidaron de incluir el manual de instrucciones. Así que uno anda apretando botones, probando, errando, buscando hacer de este viaje de la Vida un viaje de placer.

Y viajamos por esta vida a través de lo que hacemos, lo que amamos, lo que pensamos.

Saliendo de la oscuridad: el Bahagavad Guita

A medida que la humanidad se ha ido alejando de su esencia, sabia y poderosa; a medida que fuimos saliendo del Satya Yuga (la Era de sabiduría), hace entre 5.000 y 7.000 años, se hizo necesario aclarar las leyes que rigen la Vida. Por eso Krishna, en el Guita es un verdadero manual de instrucciones que acerca la vida espiritual a cualquier persona de cualquier condición. Y es que en otros tiempos la vida espiritual era para los monjes, para la casta espiritual. Sin embargo, la vida espiritual no es de puertas para adentro, sino que se libra en en la Vida. Merece la pena leer el Guita y anotar las conclusiones personales aplicables a la propia vida. Te aconsejo que busques la interpretación de un yogui, no de un intelectual (por ejemplo, la traducción de Swami Sivananda).

El ser humano es movilizado por tres fuerza esenciales: la acción, el amor, y la necesidad de comprender. De ahí surgen los viejos margas o caminos del Yoga: Karma, Bhakti y Gñana Yoga. Si está en nuestra naturaleza la acción, el amor y el movimiento del pensamiento, ¡sirvámonos de ellos para evolucionar, despertar y unirnos en el Yoga con todos los seres!

En el Bahagavad Guita Krishna le expone a Arjuna cómo hacerlo a nivel práctico a través de «la batalla de la Vida». Una mente clara, la capacidad de enfocarla y la comprensión de cómo ésta opera, son necesarios para poder arrojar luz y sabiduría en cada acción, en la compasión y la comprensión que propuso el Guita.

Conociendo la mente: los Yoga Sutras

Así más adelante, hace unos 2500 – 1500 años se vuelve necesaria la aportación de Patanjali, quien sistematiza en sus Yoga Sutras un método que va del Yoga Externo al Yoga Interno; el Ashtanga Yoga. Ocho pasos cuidadosos y ordenados que abren el camino del Raja Yoga: el Yoga real, el estado supremo al que puede despertar el ser.

Patanjali nos incita con el Raja Yoga, a recuperar la capacidad de reunificar los rayos dispersos de la mente, usando la fuerza del pensamiento (la más poderosa del universo) en aras de actuar con sabiduría, amar con grandeza y comprender…

Propone las actitudes esenciales (Yamas y Niyamas) que permiten recojer la fuerza centrífuga de la mente y volverla centrípeta; propone desarrollar fuerza y resistencia, estabilidad y ligereza. Nos impele a ejercitar el músculo de la atención sostenida hacia la concentración, para la disolución, comunión o Yoga.

Como uno de los primeros psicólogos de todos los tiempos, Patanjali explica detalladamente la naturaleza de la mente, sus cualidades y movimientos… Y explica cómo generar las condiciones en las que la mente cesa. Solo desde la sabiduría que brota de una mente aquietada puede el ser humano guiar su Vida con elegancia.

Patanjali, pues, aporta el conocimiento que nos permite poner a punto la herramienta de la mente. Y lo hace esencialmente en base a la observación; es lo que hoy día llamamos meditación (por extensión).

Pero el ser humano sigue involucionando. Se aleja de su naturaleza esencial; es incapaz de sentarse y enfocar los rayos de la mente dispersos, su energía vital se despilfarra. Agotado y angustiado, sufre, ignora quién es y el sentido de su vida, de la Vida. ¿Cómo actuar, amar o comprende con sabiduría desde ese estado?

Accediendo a la Conciencia a través del cuerpo: el Hatha Yoga Pradipika

Hacia el siglo XVII Swatmarama condensa las enseñanzas en el Hatha Yoga Pradipika, un manual que en este caso «desciende un peldaño mas abajo», en la medida en la que busca reclamar, actualizar y dirigir esas fuerzas vitales, más cerca de la biología, que habitan al ser humanano.

En cuatro pasos esenciales (Patanjali propuso ocho,) el Hatha Yoga Pradipika detalla cómo purificar y desarrollar un cuerpo sano y radiante, poderoso y resistente a través de Kriyas, Asanas, Pranayamas, Mudras y Bhandas. Swatmarama explica que el ser humano contemporáneo necesita un proceso que empiece en la carrocería del vehículo… Una puesta a punto total. Reconstruir la presencia de la conciencia sabia, desde el aspecto más denso del individuo: el cuerpo.

Los ásanas y pranayamas y todas las técnicas propuestas por el muy popular Hatha Yoga (en todas las versiones que podemos disfrutar hoy. caliente, frio, lento, fluido, impecable….) tiene el único propósito de:

1º despertar y movilizar la fuerza vital o prana; 2º incrementarla y potenciarla; 3º equilibrarla; 4º dirigirla; 5º trascender la mente y la identificación con sus contenidos.

La Mente Individual (Antakarana) se nutre del prana. Si este está potenciado y equilibrado, las facultades superiores de la mente guiarán al individuo (la intuición y la consciencia discriminativa). El estado de Raja Yoga al que conduce el Hatha Yoga, el estado de sabiduría natural, iluminará las acciones, el corazón y la comprensión del ser humano.

A lo largo de la historia, el Yoga ha ido ofreciendo manuales y herramientas acordes al nivel de evolución o, mejor dicho, de involución del ser humano. A medida que se hacía necesario, yoguis, rishis y sabios fueron dejando «miguitas» por el camino del Yoga.

Estamos recorriendo el camino del Yoga todos juntos. Por favor, no olvidemos sobre todo los que enseñamos a otros, que los asanas son un peldaño del camino, y que el Yoga es un camino que debe terminar en una experiencia de vida plena, profunda, consciente y armónica.

Las prácticas yóguicas o técnicas que realices deben dejar un reflejo en tu vida y en tu capacidad para gestionarla, en tus relaciones humanas y la sabiduría intuitiva que te guia.

Eso es el Yoga… nada menos que eso. Por eso lo llamo, con permiso, Yoga Profundo.

Con la inspiración de Swami Sivananda, Swami Vishnudevananda, B. S. K Iyengar, Danilo Hernández, mis padres y todos aquellos que les inspiraron a su vez. Gracias.

Eva Klimberg. Nacida en familia de yoguis, con casi 25 años de experiencicon y 10 años de vida monástica en la tradición yóguica de la orden de los Swamis (tomó votos de Brahmacharya -novicia- en Utarkashi, India, en 2001). Hoy profesora formadora de psicología y filosofía profunda del yoga, meditación y pranayama en varias formaciones de profesores. Actualmente imparte el «Máster en Sadhana & Filosofía Profunda del Yoga». Co-directora de Yoga Art Studio en El Escorial. Organiza Retiros y Vacaciones de Yoga por toda la geografía nacional.